Mapache quiere hornear pastel de manzana, pero como no tiene huevos, va a casa de Zorro; sin embargo, este necesita una escalera para reparar su tejado. Caminan juntos a casa de Tejón, quien se encuentra muy ocupado y necesita ayuda para resolver un crucigrama. Como se trata de algo relacionado con "miel", se dirigen a ver a Oso. Por el camino se les une Corneja; los cuatro avanzan por los prados, comen moras y encuentran a Oso intentando pescar en el arroyo. Con un ligero trazo de pluma, Philip Waechter cuenta de forma poética la historia de cinco amigos, que están ahí para ayudarse unos a otros. Pero a los mapaches, zorros, tejones, osos y cornejas les encanta vagar juntos por los prados, recoger bayas y dejar que el sol brille en su pelaje y en sus plumas y pasar juntos un gran día.