En un presente parejo al nuestro, se descubre una cripta bajo el sótano del Congreso de los Diputados y en su interior la tumba de una dama sin rostro, sin nombre, sin cruz. Tras varios años de crisis sanitaria y política, los diputados no sospechan que, literalmente bajo sus pies, está a punto de abrirse una puerta del infierno. Entonces, se celebran elecciones generales y los resultados suponen un terremoto en el panorama político nacional: dos grupos emergentes y radicales se disputarán la formación de Gobierno ante la incapacidad para llegar a un acuerdo moderado por parte del PP y el PSOE. La primera de esas fuerzas nuevas se llama Escarmiento y la encabeza don Baldomero Cuervo, un caudillo visionario que añora el espíritu de la Reconquista. La segunda, la coalición Arcoíris, amalgama de movimientos anticapitalistas e identitarios, la lidera el imán fundamentalista Haidar al Isbani.