Hay que rendirse ante la evidencia: algo nuevo pasa bajo el sol. Los majestuosos procesos físico-químicos que organizan el sistema Tierra, la trayectoria evolutiva de los seres vivos, la composición de los suelos, de las aguas, todo esto lleva consigo, desde hace un tiempo, la marca de las actividades humanas.
Las preocupaciones ecológicas están abriendo brechas en las visiones dominantes del progreso, del desarrollo, de la riqueza y, de forma más general, en la propia idea que uno se hace de la coexistencia social.
Cultura ecológica se fija como objetivo poner al alcance del mayor número de personas los debates que se realizan actualmente sobre la cuestión ecológica. Estos debates no convocan solamente a la antropología, la sociología, la historia, la geografía y la economía, sino también a ámbitos del saber menos formalizados como la filosofía. Sus contenidos cuestionan la organización de los conocimientos, las normas políticas y el marco técnico de la naturaleza.
"Cultura ecológica es un manual del Antropoceno para luchar contra nuestra ignorancia colectiva sobre ecología".
Le Nouvel Observateur