¿Quiénes son los agentes implicados en la creación de significado en inteligencia artificial? ¿Son esos resultados verdades indiscutibles científicamente? ¿A quién beneficia que las soluciones de IA sean tomadas por absolutas referencias en tecnología punta? ¿Qué coste tiene para los individuos? ¿Y para el planeta?
Esta obra es el resultado de más de diez años de investigación acerca de la extracción de datos a gran escala, tanto del coste material del mismo —explotación de minas de tierras raras, árboles en extinción, recursos subvencionados como el agua o la electricidad, explotación de mano de obra—, como de las estrategias subyacentes al dominio de una tecnología que perpetúa el poder y sus sesgos sociales y culturales.
Un puzzle donde cada pieza es diseccionada y analizada con minuciosidad científica; un mapa fascinante sobre la avara explotación de los recursos naturales, trabajadores tratados sin escrúpulos, una selección de la información sesgada desde el mismo momento de su recopilación y un pacto entre los estados y las empresas privadas que obvian las responsabilidades que conlleva la extracción y el tratamiento de información privada carente de un contexto. En este libro, la autora nos ofrece una amena explicación de por qué la inteligencia artificial ni es inteligente ni es artificial.