Un país que no existe, una isla que la mitad del año es española y la otra mitad es francesa, una habitación de hotel con cama en Francia y cuarto de baño en Suiza, uno de los poquísimos territorios del planeta que nadie ha reclamado, el único lugar del mundo donde se puede cruzar la frontera treinta veces por treinta lugares diferentes en menos de veinte minutos, un territorio que pertenece a Noruega y cuyos recursos naturales pueden ser explotados por cualquier país... El mundo nos brinda innúmeras curiosidades geográficas que, si bien a menudo generan tensiones diplomáticas, son una fuente inagotable de asombro cuando estos territorios insólitos se descubren.